Logo Derecho - Bann

Chiclana, cuna de oficios-La viña-Manuel Vela Piñero: De pura cepa


PEPE VELA M [colaboraciones].-

Desde tiempos inmemoriales se conoce la vid. Se cree que su origen está en la tierra de Armenia, en Irak, pasando a Egipto y posteriormente a todo el mediterráneo. Parece ser que fueron los fenicios los que la introdujeron en la provincia de Cádiz. Desde Sanlúcar hasta Chiclana, nuestras vides pertenecen al marco de Jerez, donde las mejores tierras son las albarizas por su gran propiedad de retención de agua. Este mes la viña es la protagonista y el entrevistado es Manuel Vela Piñero de la familia de los Quinientas, familia de varias generaciones de hortelanos y viticultores.

Había diferentes  tipos de uva que poco a poco han ido reduciéndose, como la Beba, la Rey o la Palomina Jerez, autóctona de nuestra zona y de más calidad que la palomina actual de más producción. Se mantiene la moscatel y la Pedro Ximénez, aunque se van introduciendo  otras de origen francés como la Cabernet Sauivignon o la Chardonnay y ampliándose las plantaciones de viñedos en pueblos que antes no producían.

En todo el marco de Jerez hemos pasado de 23.000 aranzadas de finales de los años 70  a unas 7.000 en la actualidad por la política europea de subvenciones que hubo para arrancarlas y en Chiclana de unas 7.000 a 200. Para pensar.

Manuel Vela Piñero nació el 9 de febrero de 1937, tiene 79 años y es hijo de Rafael Vela y de Beatriz Piñero, que crearon una familia de cinco miembros, tres hermanos y dos hermanas. Estudió en los hermanos de La Salle hasta los 13 años, cuando lo dejó para empezar a trabajar en la viña con su padre, hasta irse a la mili a Camposoto, en San Fernando y cuando venia al mediodía se iba a la viña para no perder punta.

Conoció a su mujer, María del Carmen Esparragoza Romero, con la que se casó en 1978, teniendo dos hijos, Manuel y Beatriz, a los que  solo les gusta la uva en la mesa, por la vida tan dura que ha llevado  su padre.

DEDICACIÓN EXCLUSIVA A LA VIÑA

En esa época me cuenta que “iba a las viñas con bestias, primero con mulos, que servían para las labores y para transportar la uva, y después con un Pascuali”. Recuerda que la única época buena fue cuando la uva valía a tres pesetas, después a seis y poco después a doce: “Gracias a esa subida pudimos comprar el camión Avia, que nos ayudaba mucho en nuestro trabajo”. Pero también esa subida sirvió para, posteriormente, motivado por un exceso de nuevas plantaciones, hundir los precios por los excedentes de kilos.

Las labores de la viña se inician a finales de enero plantando la raparía, oriunda de EE UU, que soporta los ataques de la filoxera. En julio se injerta en yema, si se pierden algunas se vuelven a injertar en enero. A partir del tercer año es cuando empieza a tener buen rendimiento y anualmente se le hacen los trabajos necesarios, como la poda y la castra para dejar solo el pulgar del año siguiente, que será la vara donde saldrá la siguiente cosecha.

Entre tanto ponemos los fertilizantes para prevenir, los sulfatos para el mildéu y para el oídium los azufres: “Antes la viña por aranzada daba a razón de 2000 kilos más, porque se le echaba más estiércol”.

Cuando se casa su hermano Agustín, su padre le empieza a dar un jornal, pero a él, que está soltero (se casaría a los 39), solo le llega para “ir pasando”. Cuando él se casa con María del Carmen es cuando deciden repartir las viñas entre los cinco hermanos, pues ya no dan para mantener a varias familias y como su padre no tenía jubilación, entre todos acuerdan una paga para que se pudiera mantener, primero de padre a hijos y después de hijos a padre.

MIRANDO EL TIEMPO

Los viticultores de Chiclana han tenido desde siempre grandes problemas para mantener las explotaciones. En 1894 la filoxera arrasó todo el marco de Jerez. Posteriormente, en abril de 1919 cae en Chiclana una helada que destrozó más de 2000 aranzadas de viñas.

De todas formas, el día a día era y es la misma historia: “Siempre mirando el tiempo, que si hace mucho levante, que si poco poniente, que ha llovido poco o que ha llovido mucho” y al final, cuando llega el momento de la recogida, el último escollo: ¡los precios!, que no cubren los gastos. Dijo, resignado: “Esto no merece la pena  y lo voy a vender tó”.

La última vez que cobró la uva le dieron 21 céntimos y entonces decidió arrancarlas, pues no cubría gastos: “Si los bodegueros de Chiclana hubieran estado en el marco de Jerez, hubiera sido diferente”.

TRABAJAR MUCHO PARA MANTENER LA FAMILIA


Lo que recuerda de joven es que tenía que trabajar mucho para mantener la familia y entre las labores de la viña, sembraban hortalizas y verduras para el gasto casero, vendiendo los excedentes.

Así ha transcurrido su vida. Igual que sus hijos, cree que la gente joven no quiere campo y piensa que la viña no tiene futuro, pues “los jóvenes no beben vino”.

Yo quisiera pensar de otra manera, pues creo que se debería buscar la forma de que el Marco no solo englobara a las bodegas, sino también a las tierras de crianza, ya que podríamos terminar en una zona vinícola sin vides.

Además, se debería hacer más esfuerzo entre todos, para no perder la esencia de lo que durante tantos años nos ha identificado como un pueblo de “pura cepa”.





5 comentarios:

  1. Pepe Vela :Esparragosa no es con Z,Paco Esparragosa.Recuerdos un abrazo.

    ResponderEliminar
  2. Me ha gustado mucho, Manolo digno sucesor de Rafael Quinientas gran representante de la viticultura chiclanera, que murió sin entender, como nos ha ocurrido a muchos, que la uva del término de Chiclana con excelentes tierras albarizas y sus mostos pertenecieran al marco del Jerez y no poderlo hacer sus vinos. Una pena que se pierda la dinastía de los Quinientas en las viñas.

    ResponderEliminar
  3. Las viñas se perdieron en Chiclana por la mancha de cinverguenza que la gobernado y los ladrones que llevaba la cooperativa quel que menos tiene un chalet a primera linea de playa se lo comieron todo los sudores y fatiga de los chiclanero honrado y ni uno fue a la cárcel ni investigado

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Y ahora viene con el museo al vino para que coma 4 enchufado cuando ante el vino daba de comer a toda Chiclana y ahora no hay vino ni para emborrachar a medio solajita

      Eliminar
    2. El PSOE donde pone el ojo, pone la corruptela.

      Eliminar

Los Comentarios publicados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de sanciones legales.

Por favor al redactar tu comentario sobre EL TEMA, cuida las formas.
No utilices 'copiar y pegar' para grandes textos, ni mayúsculas en exceso. No poner textos en el nombre. No direcciones web externas. Mejor sin abreviaturas SMS. Los comentarios pueden ser borrados (ver Advertencia Legal)
.